PATRICIA DOMÍNGUEZ: GREEN IRISES

La artista chilena Patricia Domínguez explora las prácticas de sanación que surgen de los puntos donde los imaginarios se enfrentan y superponen como resultado de los encuentros coloniales. Arraigada en la continua investigación sobre etnobotánica realizada por la artista en América del Sur, su primera muestra individual en el Reino Unido, que tiene lugar en Gasworks hasta el próximo 8 de septiembre, invita al espectador a imaginar futuros posibles para humanos y plantas que prosperen en las grietas de la modernidad.

La exposición presenta una instalación de videos junto con una serie de altares y tótems. Combinando el surrealismo etnográfico y la ciencia ficción, el trabajo de Domínguez abarca una serie de mitos, símbolos y rituales moldeados por el extractivismo y las finanzas globales, desde el culto sincrético de Nuestra Señora del Cerro Rico -una infame mina de plata en Bolivia donde murieron ocho millones de nativos-, hasta el Museo arqueológico dentro de la oficina central de Scotiabank en Cusco, construido sobre las ruinas de un palacio inca.

Patricia Domínguez, Green Irises, 2019. Vista de instalación. Comisionada por Gasworks. Cortesía de la artista. Foto: Andy Keate

Las esculturas repartidas por toda la exposición incorporan objetos talismánicos con camisas de hombres de negocios y productos electrónicos de consumo masivo como una manera de exorcizar los efectos del neoliberalismo en el cuerpo, señalado por la presencia de plantas curativas como la Rosa de Jericó, que se dice que absorbe las radiaciones dañinas de las conexiones Wi-Fi, y el Aloe Vera, usado para aliviar el síndrome de visión por computadora.

El reciclaje de materiales y símbolos de Domínguez es un testimonio de su encuentro con un tótem enigmático en forma de pájaro en las colecciones de los misioneros salesianos en Punta Arenas, Chile. Imaginado por niños nativos bajo el dominio colonial, este artefacto -recreado en la muestra- personifica el bricolaje cultural como un medio para resistir el borramiento de los mundos y los medios de vida indígenas.

Patricia Domínguez, Green Irises, 2019. Vista de instalación. Comisionada por Gasworks. Cortesía de la artista. Foto: Andy Keate

Cerámicas, acuarelas y ensamblajes de objetos encontrados se reúnen alrededor de una instalación de video con forma de altar cibernético. En su zona central, el holograma de un jarrón precolombino que representa un pato llorón sirve como un avatar para lamentar los muchos mundos suprimidos por el poder colonial.

La pieza central del altar es un video de 25 minutos de duración titulado Eyes of Plants, que explora la práctica de sanación con rosas y otros rituales mestizos que emergen en las zonas de contacto entre cosmologías radicalmente diferentes. Introducidas por los colonos europeos, las rosas adquirieron poder mágico en el imaginario colonial a través de la leyenda de Nuestra Señora de Guadalupe, quien eligió la rosa como un símbolo para manifestarse ante Juan Diego, el primer santo indígena de las Américas. Incorporando ilusiones ópticas, accesorios hechos en casa y parientes cercanos como actores, el video de Domínguez induce una experiencia alucinante.

El video es custodiado de lado y lado por dos animaciones digitales de gran tamaño de los iris escaneados de la artista. Mirando a la audiencia, los ojos verdes de Domínguez, un signo de la herencia europea, se convierten en un registro increíblemente fotorrealista de encuentros coloniales.

La exposición está acompañada por una publicación de artista diseñada en colaboración con Futuro Studio. Concebida como una obra de arte, incluye un ensayo que relata un viaje etnobotánico a través de tierras indígenas en Bolivia, Chile y Perú. Abordado con una sensación de asombro, el texto devela las historias enterradas bajo la superficie de las represas hidroeléctricas, las estaciones de servicio y otros «templos del extractivismo».