TOUR DE TOURS: TEMPORADA DE FERIAS DE ARTE EN BUENOS AIRES

Esta semana explota el arte en Buenos Aires: se celebran dos ferias de galerías de arte al mismo tiempo, la histórica arteBA y la flamante Affair y, en paralelo, se desarrolla un programa de invitados especiales internacionales. Ya sabemos que recorrer una feria significa observar obras de arte de todo tipo, asistir a conversatorios y charlas sobre temas vinculados, conocer publicaciones y editoriales (independientes y no) dedicadas al arte, y encontrarse con colegas y amigos.

Una feria (¿qué duda cabe?) es un lugar de encuentro, eventos, exposición y visibilidad, y, sobre todo, de tramas humanas. Ese es uno de los mayores valores de arteBA: ser un nexo que une a todos los actores de los diversos sistemas del arte. En esta nota, hablaremos primero de ella y luego de Affair.

No está de más observar que, en un momento de crisis económica para la mayor parte de la población argentina, las dos ferias están desarrollándose con muchas ventas, aunque no de precios super altos. Y aunque la tormenta de Santa Rosa justo se manifiesta en estos días, nada detiene el encuentro ni el interés por ver obras y charlar con artistas y galeristas. Sí: es temporada de arte, de encuentros y de lluvia. Momento de descubrimientos y ventas: minuto de ferias.

arteBA 2024: EL GIRO DEFINIDO

Desde hace algunos años, con la nueva dirección de arteBA -con Larisa Andreani como presidenta y Lucrecia Palacios como directora ejecutiva, junto con un fabuloso consejo de administración y comité-, cambió algo su perfil: mantuvo su estructura, siguió igual de efectiva pero más discreta. Esto le juega a favor, ya que se muestra más accesible a los diferentes públicos y no solo a los especializados y a los coleccionistas, lo que invita aún más a visitarla, recorrerla y disfrutarla.

Organizada en dos áreas, la Sección Principal -en donde se encuentran las galerías más establecidas, tradicionales e históricas-, y Utopías -que alberga espacios alternativos y proyectos experimentales, o que no necesariamente se constituyen como galerías-, la feria abrió cinco días en total: dos días para invitados profesionales y coleccionistas, y tres días para todo público.

Fue durante los dos primeros días cuando se realizaron las adquisiciones institucionales (generalmente de museos), así como la mayoría de las compras de coleccionistas. Fue, también, durante estos dos primeros días cuando se entregó el Premio arteBA al Coleccionismo a la talentosa mecenas, coleccionista y artista Amalia Amoedo. Ella es, sin dudas, en este momento, la persona que más apoya al arte contemporáneo de Argentina a través de su Fundación AMA Amoedo, de sus múltiples convocatorias y de su residencia para artistas internacionales Casa Neptuna, ubicada en Uruguay y diseñada por el conocido artista pop Edgardo Giménez.

Por todo esto este premio es tan merecido, y corona una seguidilla de reconocimientos entregados este año a Ama Amoedo, como el Premio a la Filantropía Laetitia otorgado por la feria Este Arte (José Ignacio, Uruguay), y el nombramiento por la legislatura porteña como personalidad destacada de la cultura de Buenos Aires.

Además de las dos grandes secciones de arteBA, se encuentran Isla de ediciones, el espacio de las publicaciones sobre arte, organizado por la Fundación Proa; stands institucionales con diferentes proyectos, como los de las empresas Santander y Zurich y el Ministerio de Cultura de la ciudad de Buenos Aires; y la exhibición de centenares, miles de obras de arte.

Aquí va mi TOP 10, seleccionadas de entre una inmensa cantidad de preciosas y muy buenas producciones. Podrás encontrarlas caminando la feria.

Témperas sobre papel de Rómulo Macció (Galería Vasari) adquiridas durante arteBA 2024 por el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) de Argentina. Cortesía de la galería

1

Descubrimiento y gouache

Las témperas sobre papel de Rómulo Macció (Argentina, 1931-2016) en la galería Vasari son, sin dudas, un hallazgo de Marina Pellegrini, la galerista. Esta serie poco conocida de Macció, realizada en 1969, estuvo expuesta hace décadas en la galería Rue de Seine, en Saint Germain (París). El propio Macció las trajo a la Argentina durante el siglo pasado. Y si bien replicó algunas de estas composiciones más tarde en lienzos de gran escala, jamás fueron pensadas como bocetos.

Tres de estas obras fueron adquiridas por el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) de Argentina, gracias al Programa de Adquisiciones en Museos y los aportes de la Asociación de Amigos del MNBA (AAMNBA), cuyo presidente, el abogado y escritor Julio Crivelli, se destaca en el grupo de la AAMNBA, orientando con sabiduría.

Las dos acuarelas de Kazuya Sakai que pueden verse en el mismo espacio de la galería son, también, piezas poco conocidas, que pertenecen a la producción de sus últimos diez años de vida. Y las deslumbrantes “cajas-esculturas” de María Simón suman otro tanto: la Caja número 1, una escultura en bronce de 1966 acompaña al tapiz de lana Caja número 1, de 1979, con hilos de plata. Una pieza única.

2

Berni partout

Como todos los años en arteBA, Berni (Argentina, 1905-1981) aparece por varios lados y, como siempre, deslumbra. Llama la atención la muy potente obra La torturada en la galería Cosmocosa que es, antes que una pintura, un collage con gran volumen, prácticamente una muñeca creada con harapos y telas como parte de un collage. Un híbrido de materiales pobres y volúmenes que refuerzan su intención de “golpear” en quien la observe, su significado.

La pieza había estado expuesta en el Museo Nacional de Bellas Artes de Neuquén en 2006, en la muestra Sucesos argentinos, y en Cosmocosa el año pasado. De La torturada emergen contundencia, dolor, injusticia, política, oscuridad y poder, varios de los temas presentes en el Berni más político.

Hay otros Berni en arteBA: la fabulosa Cráneo y corazón, una pintura de la época surrealista del artista, que expone un gran cráneo apoyado sobre un pequeño corazón sangrante con dos personas dando vueltas por dentro. Y está La cena de Navidad, una pequeña témpera-collage sobre papel de 1961 que muestra una familia de clase media alta brindando por el nacimiento de Cristo. Ambas en el stand de Galería Sur.

Siempre los Berni exponen a la Argentina desnuda, casi cruda, casi descarnada. Y a los seres humanos despojados, mirados con lupa. Por eso Berni siempre da mazazo.

3

Brillante sobre el MIC

Las esculturas en bronce pulido de Marcelo Martín Burgos (Argentina, 1971) en el stand de Rubbers son nítidas, lustrosas, brillantes, precisas: una serie de personajes con algo de comic, presentados en bronce espejado. Personajes que generalmente están dibujados, o creados con cartón o plásticos, pero que aquí Burgos los crea con un material noble e inesperado. De allí la sorpresa, la aparente contradicción y dialéctica lo que los hace llamativos.

Mención aparte merece, dentro del conjunto de esculturas, esa mano en bronce pulido espejado que el artista realizó para su hija. Representa, en cada uno de sus dedos y en su palma, lo que el artista cree que su hija necesitará en la vida: una cabeza, que son los sueños; un elefante, que simboliza la fuerza; la daga Sikh, la compasión; el fuego, que es el amor; la ardilla, que representa la inteligencia; y la estrella, la suerte.

Delicia de escultura, por lo que simboliza, por el gesto y mensaje amoroso del artista a su hija, y también por su exquisita materialidad. 

4

La mesa está servida

El espacio alternativo La mesa está ubicado en Boedo, un barrio en Buenos Aires de clase media-media, con cafés y restaurantes, donde no hay galerías de arte ni museos. Funciona con talleres y también como almacén de productos alimenticios orgánicos, abriendo de vez en cuando para ofrecer comida. En esta, su primera vez en arteBA, presenta algunas piezas de cerámica de Ignacio Sandoval super interesantes, junto con botellas de aceite de oliva y paquetes de yerba.

Este mix entre arte y comida (algo que se volvió usual en las galerías, ferias y bienales de todo el mundo, desde hace 15 años al menos) siempre resulta atractivo y fuerte. Hay en el acto de brindar comida, de cocinar, un gesto generoso, que reúne dos placeres al menos: observar y comer. La Mesa no se equivoca con la propuesta que presenta en la feria, ni tampoco con los precios totalmente accesibles en los que ofrece sus piezas, tan originales, en especial, las cerámicas.

5

Quimera: te necesitamos

¿Qué es una quimera? Es aquello que se imagina y se propone como cierto, sin serlo. Aunque también podría ser ese monstruo que vomitaba llamas y tenía cabeza de león, vientre de cabra y cola de dragón, según la mitología clásica. Pero aquí, en arteBA, Quimera es todo esto y es, sobre todo, una galería de arte. En esta edición, la galería apuesta fuertemente por la pintura (¡y qué alegría esto!). Vemos en el espacio esas interesantes obras de Franco Fasoli sobre interiores de casas que parecieran de las provincias de San Juan, Catamarca, con patios de piso de tierra, parras, sol y letanía, letargos.

O las pinturas de Lorena Ventimiglia, esas gotas densas, condensadas de materia: gotones que son núcleos de color y pintura, pero en volumen. Indagaciones de la pintura por la pintura en sí, cuestiones en torno a la materia pictórica y al color (límpido, exacto). La serie de acuarelas de Ana Clara Soler que expone la galería fueron adquiridas por el Museo de Arte Contemporáneo de Salta (MAC) para pasar a integrar su colección, gracias al Programa de Adquisiciones en Museos.

6

Dream-team de chicas super-poderosas

Las pinturas de Cristina Schiavi (Argentina, 1954) y las esculturas de Elba Bairon (Bolivia/Argentina, 1947) que pueden verse en el stand de W marcan el paso contundente de dos artistas mujeres con obra y trayectorias muy sólidas, ubicadas actualmente a nivel profesional y vital en un excelente punto. Y aquí el trabajo de la galería W tiene un gran mérito, por su impulso y apoyo en la construcción, no sólo de espacios para visibilizar las obras de artistas mujeres argentinas, sino también por la construcción de discursos que inscriban a esas artistas y a sus producciones dentro de la (o las) historias del arte (una deuda que ya hace rato se está saldando).

Una exposición, que podría completar lo que se halla en el stand de la feria arteBA, puede verse en la sede de la galería de la calle Viamonte (Buenos Aires), en el marco de su programa W Archivo. Allí se realiza una especie de remake de Violaciones domésticas, curada por Andrea Giunta, remitiendo a esa muestra que en 1994 realizaron Schiavi, Bairon y Ana López en el espacio Giesso de San Telmo (actualmente inexistente), anclada en perspectivas feministas.

El conjunto de acciones que propone W desde sus múltiples espacios y proyectos confirma una posición que excede la de espacio comercial para devenir dínamo, un espacio generador de narrativas que deben ser ya creadas de cero, ya revisadas. Las contundentes obras de Bairon y Schiavi (así como las de Graciela Gutiérrez Marx) presentes en arteBA no hacen más que confirmar lo que ya sabemos: 1) los feminismos (múltiples) siempre están vivos, varias historiografías y situaciones así lo demuestran, 2) atestiguamos el caso de una galería sensible a los problemas contemporáneos y a las agendas internacionales.

W realiza gestión cultural a través de, por ejemplo, los feminismos, pero también desbordando ese tema. No se trata sólo de coincidir con una agenda feminista, sino de dinamizar la gestión cultural en direcciones poco exploradas y necesarias. Ahí van, así se desarrollan los pasos astutos de la galería W. Cualquier otra lectura más simplista y de menor ángulo acerca de la original dirección de esta galería queda en pobre o errada.

7

Acertijos

Los Batlle Planas en la galería Van Riel, y ¡wow, qué delicia…! Esas témperas en escala pequeña, con el tamaño perfecto para estos días de tormentas y lluvia se sienten próximas, amigas, íntimas. Es muy fácil establecer un diálogo con ellas e intentar develar su intriga, sus enigmas. Como pasa con casi todas las obras de Batlle Planas (Argentina, 1911-1966), representan acertijos sobre la humanidad. Es un placer aproximarse a ver estas obras en la galería Van Riel.

8

Pintoras

Las pinturas de María Guerrieri (Buenos Aires, 1973) y de Dignora Pastorello (Buenos Aires, 1914-2001) en la galería Calvaresi: el placer de pintar por pintar. María Guerrieri, disfrutando las capas de materia, los tonos bajos de poco contraste que abundan con algún destello de blanco; el formato horizontal, alargado; los temas simples y enigmáticos, contundentes. Manos con perlas, noches de lunas llenas con guantes, un brazo, demuestran intriga y delicia.

Dignora Pastorello fue una pintora naif rescatada por la galería, olvidada hasta hace poco. Su biografía nos dice que se mantuvo activa y dinámica hasta fines del s. XX, pero luego desapareció de la escena, sin haber podido tener una galería que la represente ni herederos. La artista vuelve a emerger en el stand de Calvaresi con fuerza, a través de ese pequeño óleo de 1966 simplemente perfecto cromáticamente: Terrazas.

A un costado de la ubicación de estas dos grandes pintoras, la obra de una tercera se suma a esta lista: un óleo sobre tela sin título, de 2024, de Paola Vega (Argentina, 1980), mostrando el placer de explorar la pintura, del riesgo con la paleta y con el gesto, la expresividad: el pedirle a la propia pintura ir más allá, a pura atención y agudeza.

9

¿Luogo? Lugar…

En la Sección Utopía, las pinturas de Lourdes Tomaghelli (Argentina, 1994) en el espacio LUOGO -una galería de la ciudad de Rafaela, en la provincia de Santa Fé- explotan de clima mágico, naturaleza profunda, luz nebulosa. Un placer de pintura, en escala mediana a pequeña, que vale la pena experimentar.  

10

Perros de mañana

Los dibujos de Alexis Minkiewicz en Aldo de Sousa son espectaculares: monocromáticos, de formato grande, definen con precisión escenas cotidianas con algo de entrañables. Bien diferentes de sus esculturas monumentales, estas piezas de Minkiewickz bien podrían ser compañías dentro de cualquier espacio. Hay que acercarse a verlas.

ESTO ES UN AFFAIR

La feria de arte Affair tiene dos pluses: uno es que rescata una preciosa galería comercial de estilo modernista, creada en 1957: la galería Larreta. Ubicada sobre la emblemática calle Florida del centro de Buenos Aires, había sido (hasta ahora) dejada un poco de lado, especialmente tras la pandemia. El segundo plus es que Affair se realiza ahora con galerías de arte y proyectos alternativos y comerciales, en cada uno de los locales de la galería, y estos van a quedar abiertos como galerías de arte durante los próximos años. Es decir, Affair es, en principio, una feria de arte, pero también articula un proyecto mayor, que es el que copa de ahora en más la galería Larreta, con arte y con cafecito al paso.

Affair transcurre en paralelo a arteBA, exponiendo galerías renombradas y jóvenes, como Acéfala, Julia Baitalá, Wunsch, Futbolitis, TokonOMa, Saha D (con sede en Córdoba y en Buenos Aires capital), Ankara (de Colonia Caroya, Córdoba), La cúpula, María Wonda y Tierra, mientras que Almacén (de San Nicolás), Tiempo y Zona (ambas de San Isidro) y Centro de Edición (Villa Lynch), estarán junto a Crudo, Gabelich Contemporáneo y Local 15 (todas de Rosario, Santa Fé). A estas galerías se sumarán Anecoica, Camarones, Casa Equis (con sede en México), el espacio editorial FAN, y un espacio expositivo de las residencias URRA.

Así, Affair crea un espacio de gestión, un proyecto que incluye a una feria de arte pero va más allá: funcionará todo el año, y será un espacio de galerías de arte, libros, cafés, performance y conciertos. Los organizadores -quienes invitaron a las demás galerías- son Oli Martínez (de TokonOMa); Bárbara Echevarría (Acéfala); Nacho Meroni (de Wunsch); Gab Gabelich; y María Wonda, Fernando Ferreyra de Tierra y Sasha Dávila.

BADA. SIN INTERMEDIARIOS

Así como existen ferias de galerías, en Buenos Aires también hay otras formas de vender y comprar arte. Un ejemplo es BADA, una feria donde los artistas venden directamente al público, sin la intermediación de galeristas o curadores. BADA funciona de la siguiente manera: la feria alquila un gran espacio (este año, uno de los pabellones de La Rural, en el barrio de Palermo, Buenos Aires) y, luego, la misma feria alquila stands a los artistas interesados en vender sus trabajos en este contexto.

Una característica distintiva de BADA es que no existe un proceso de selección: cualquier artista puede participar, alquilar un stand y vender. Esto da lugar a una oferta diversa de producciones y tipos de artistas, diferente de la que se encuentra en las ferias de galerías de arte.

Con una gran afluencia de artistas que desean exponer y un público interesado en descubrir, BADA se posiciona como una opción interesante dentro del panorama de ferias de arte en Argentina.