Dos Muestras en Nueva York Recorren la Obra Pionera de Jaime Davidovich
Jaime Davidovich es quizás mejor conocido en Nueva York por sus originales contribuciones a las prácticas del video y la televisión de la década de 1970 y principios de los 80, a través de Cable Soho y Artists’ Television Network. Sin embargo, su incursión en el video y la televisión fue el resultado de más de dos décadas de experimentación artística que desarrolló a partir de un interés inicial en la pintura monocromática y luego con el espacio y los procesos alineados a las prácticas minimalistas y site-specific de los 60 y principios de los 70. Nacido en 1936, sus búsquedas personales y como artista le llevaron desde su natal Argentina a Brasil, donde pasó un corto período de tiempo a finales de los años 50, para después marcharse en 1963 a la ciudad de Nueva York, donde ha vivido desde entonces.
«La obra de Davidovich se orienta hacia un cuestionamiento sistemático de los medios desde una perspectiva reflexiva, analítica y conceptual. Sus primeros videos son netamente anti-espectaculares, y su ingreso posterior a la televisión se asienta en una producción paródica y crítica, de resistencia cultural, que pone al descubierto los mecanismos ideológicos sobre los que se construye el discurso televisivo.
Tras un período de indagación plástica que lo conduce directamente al conceptualismo, su obra realiza un giro radical para internarse en el universo de los medios de comunicación a través del video. Sin embargo, una observación detallada del desarrollo de su carrera artística permite constatar el interés permanente del artista por indagar en los fundamentos de construcción de las imágenes, en sus relaciones con el entorno y en la forma en que su circulación la articula con el contexto social y cultural.
Su obra reciente enfrenta la homogeneidad discursiva de la globalización con una producción intimista y meditativa. Nuevamente, la obra artística se erige como un espacio de resistencia, pero esta vez a través de un retorno a las fuentes, tanto plásticas como mediáticas, que consolidaron su labor a lo largo de todas estas décadas» [1].
Hoy, la trayectoria artística de Davidovich cobra más vigencia que nunca. Reconociendo los aportes del artista en la construcción del discurso actual sobre los nuevos medios, el Museo del Bronx, en Nueva York, le dedica una amplia exposición que recorre sus «aventuras por la vanguardia».
Adventures of the Avant-Garde, curada por Julieta González, presenta un amplio espectro de la obra de Davidovich, desde su temprana exploración con las posibilidades del monocromo y sus preocupaciones espaciales que después informarían sus obras site-specific de finales de los años 60 y principios de los 70, hasta las obras de video de 1970 a 1990 que no sólo fueron pioneras en el uso de la televisión como un medio, sino que también abordaron temas como la identidad, la diáspora y la globalización.
El uso singular de la cinta adhesiva (tape) como medio, como una superficie, como un espacio, y luego su transfiguración en la cinta de video (video tape) como medio es revisado en esta exposición mediante la presentación de varios cuerpos de obra que resaltan la naturaleza procesual, experimental y site-specific de la práctica de Davidovich a lo largo las últimas cinco décadas.
En paralelo a la muestra en el Museo del Bronx, la galería neoyorquina Henrique Faría Fine Art dedica una muestra a una selección de pinturas monocromas de cinta adhesiva, propuestas de intervenciones con cinta adhesiva, videos y una instalación de sitio específico desarrollada especialmente para la chimenea de la galería.
Dado su interés en la pintura abstracta, Davidovich concibió la aplicación de cinta adhesiva sobre una superficie, de manera similar a una pintura monocromática. Mientras que sus obras anteriores, como Collage Tape Painting 5 y Tape on Paper 4 (ambas de 1969) presentan tiras de cinta adhesiva superpuestas sobre una hoja de papel grande, Davidovich pronto comenzó a idear instalaciones de cinta que superarían el marco tradicional y ocuparían paredes y habitaciones enteras. Con su gran escala, estas instalaciones ambientales plantearon un desafío al espectador y su percepción del espacio interior y construido.
Como señala Aimé Iglesias Lukin en el texto de la exposición, «la cinta cubre el espacio al tiempo que revela el espacio, acentuando, pero aún así distorsionando, el entorno arquitectónico». Donde antes estaba una pared blanca, un rincón, un techo, en su lugar se observa una brillante extensión de color que pareciera cobrar una dimensionalidad. Las propuestas de este tipo de proyectos pueden verse en la galería, como Adhesive Tape Project (1973), que muestra la sala entera de una galería tapada por la cinta, y el Tape Project: Cincinnati (1974), que se realizó en Not In New York Gallery ese mismo año.
«En estas obras se pone en evidencia la tendencia del artista a intervenir sobre el espacio del espectador. Éste deja de ser el observador pasivo que contempla la obra desde el lugar que ésta le impone y pasa a transformarse en parte integrante y vital de la propuesta. La magnitud de los trabajos reclama una experiencia descentralizada. Es el espectador, con su recorrido, quien orienta la lectura y quien -en definitiva- deberá reconstruir el plan original en su cabeza. Al mismo tiempo, las piezas comienzan a ubicarse en espacios inusuales, alejados de las blancas paredes de los museos y galerías. (…) El énfasis en lo procesual es otra de las características que liga la obra de Davidovich de estos años a los lineamientos del conceptualismo. Ese carácter no surge únicamente de la evidencia del proceso de realización, sino también, de la actividad del espectador en la captación del sentido de la propuesta. Tomados en conjunto, los Tape Projects pueden pensarse como fases sistemáticas en la exploración de las múltiples posibilidades de incidir sobre los espectadores y el espacio a partir de una premisa (material) constante. Esto los ubicaría en la línea del conceptualismo sistémico, caracterizado por el uso de sistemas o de seriaciones como método de composición anti-formalista tendiente a evitar las imposiciones del ordenamiento expresivo» [2]
En la muestra es notable la inclusión del video La Patria Vacía (1975), ya que es una de las pocas obras en las que Davidovich examina su identidad como inmigrante argentino y su experiencia de la historia reciente de la Argentina y los acontecimientos actuales visto desde un exilio autoimpuesto. Como en sus otras obras en video, la cinta está presente en esta pieza, pero sus cualidades tienen una función más siniestra. En lugar de cubrir u ocultar la superficie por debajo de ella, la cinta está en cambio censurando y haciendo referencia directa a las limitaciones de los derechos civiles que se estaban convirtiendo en un lugar común en la política argentina. Tiras de cinta negra se colocan sobre un monitor que muestra las imágenes del funeral del ex presidente argentino Perón y trozos de cinta obstaculizan la imagen del barrio argentino en Jackson Heights, en el condado neoyorquino de Queens. De las diversas aplicaciones de la cinta en la obra de Davidovich, que van «desde la exploración formal de la abstracción y la fenomenología a la referencia política a la censura», Iglesias Lukin destaca la doble función de ésta como material que «cubre, mientras que al mismo tiempo revela».
Jaime Davidovich
Adventures of the Avant-Garde
Bronx Museum of the Arts, Nueva York
Hasta el 14 de junio de 2015
*
Tapes Period. 1969-1975
Hasta el 16 de mayo de 2015
_____________________________________________________________________________________________
[1] Rodrigo Alonso, Torn Identity, texto sobre Jaime Davidovich publicado en el sitio web del artista
[2] Ibidem
También te puede interesar
ALESSANDRO BALTEO-YAZBECK EXPONE PANORAMA DE LA VENEZUELA AUTOCRÁTICA
Henrique Faria Fine Art, en Nueva York, presenta una exposición individual de Alessandro Balteo-Yazbeck (Caracas, 1972) que abarca veinte años de su producción artística, con obras que analizan el panorama actual de Venezuela, sumido...
ROOTED BEINGS
En una época altamente sensible y crítica en la que como humanos nos replanteamos nuestra relación con las plantas y los hongos, la Wellcome Collection presenta Rooted Beings, una exposición que nos resitúa frente...
ADRIÁN VILLAR ROJAS GANA PREMIO EN LA BIENAL DE VENECIA
Dos meses de trabajo in-situ, diez escultores y constructores, seis asistentes, productores y diseñadores, y 25 toneladas de materiales consumió la producción de la instalación El asesino de tu herencia, con la que el artista Adrián…