JAVIER RODRÍGUEZ: ANTICRISTO

Galería Metales Pesados Visual, en Santiago de Chile, presenta hasta el 29 de octubre la muestra Anticristo del chileno Javier Rodríguez (Santiago, 1981). La exposición consiste en una serie de historias dibujadas en las que narra una misión del grupo guerrillero chileno Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), mezclando ficción y realidad, con una paleta monocroma que hace referencia a un relato de tipo periodístico y documental.

En Anticristo, por medio del dibujo, Rodríguez narra una secreta venganza por parte del FPMR, junto a la figura de un misterioso “vengador y guerrillero vampírico”, tras los hechos reales acontecidos en Chile en el invierno de 1987, en el marco de la Operación Albania, ocasión en que la CNI –la policía de inteligencia de la dictadura de Augusto Pinochet– dio muerte a 12 miembros del grupo clandestino. Para dar cuerpo al relato, el artista propone una serie de dibujos en donde el imaginario representa locaciones reconocibles, como entornos cotidianos y espacios marginales, así como de espacios propios del cine de horror, donde dialogan seres ficticios con personas reales y ciertos personajes televisivos, cuya factura técnica –marcada por el negro y la gráfica de corte contingente– desatan una misteriosa pero coherente manera de aproximarse a un fragmento de la historia del FPMR.

Sobre Anticristo y el trabajo de Rodríguez, el curador Rodolfo Andaur comenta: “Las imágenes de Anticristo sacuden su plataforma documental, que ha sido construida para mantener ya sea un discurso oficial o metafórico sobre el ocultamiento de información que sentencia los mitos. Esta exposición en su contexto es una obra que inexorablemente expande muchos aforismos; y esto se debe a que Rodríguez ha estado desafiando otros discursos plásticos y audiovisuales que han calado en su proceso de creación. […] La inigualable premisa que muestran las secuencias que poseen estos dibujos, están presentes en la ficción documental que, con su carácter mágico e inesperado, son capaces de invocar un entorno físico mediado por las texturas que presentan sus protagonistas. Al mismo tiempo, esto cuestiona el rol del documental gráfico que presenta Rodríguez, ya que el complejo panorama o sea la realidad que impone la cultura visual sucumbe ante el escepticismo económico que vivimos y que sin duda pasa a calibrar el futuro de la política”.

En tanto, la historiadora del arte Carolina Olmedo indica: “La compleja relación construida entre texto e imagen a partir de la gráfica manual, en cada momento de la narración (prensa, cómic, cine, documental), posee un recurso gráfico propio, aludiendo en todos los casos a la necesidad de revitalizar el debate sobre la memoria histórica a partir del involucramiento y responsabilización de un nuevo espectador masivo. Entre ellos, una amplia generación de jóvenes nacidos en transición que no experimentó en primera persona los apremios de la dictadura militar. La aparición del propio artista como un personaje al interior de la trama –que inicia y culmina con la ficción en torno a su propia desaparición– es una interpelación directa a una generación que, por su juventud, encontrarán en la lectura de este trabajo una primera realización efectiva de su derecho a la memoria por medio del ejercicio de la voz propia”.

Junto con la exposición, se contempla el lanzamiento de una publicación homónima, siendo ésta una adaptación de los dibujos y textos de Javier Rodríguez en la muestra al formato de libro.