LEONARDO PORTUS: AHÍ

Ahí es la segunda muestra individual del artista Leonardo Portus en Die Ecke Arte Contemporáneo. La exposición, abierta hasta el 28 de mayo, se compone de tres obras en técnica mixta y una instalación que reinterpretan la gráfica y la crónica de la revista chilena policial magazinesca VEA de los años 60.

La antigua revista VEA ayudó a construir gran parte del imaginario de generaciones de chilenos desde las décadas del 50 al 70. Principalmente, su crónica policial, abigarrada de imágenes y con una potente tipografía y sello escritural, generó una mirada morbosa sobre la ciudad y sus lugares luctuosos; espacios peligrosos cargados de delito, pulsión sexual y desacato.

Es fácil, sin duda, dejarse atrapar por la nostalgia de su melodrama kitsch. Sin embargo, ese mismo espíritu conservador de denuncia y disciplinamiento se halla hoy aún vigente bajo otro formato, en docurealitys televisivos o en cierta prensa escrita.

A través de diversos elementos, Ahí reconstituye tres hechos trágicos que van desde un incendio en Valparaíso hasta suicidios en dos modernas torres de departamentos santiaguinas y la trágica historia de amor de dos jóvenes en una población periférica capitalina. El artista los recrea desmontando el “estilo” de revista VEA, su tipografía rojo y negro que evoca a Eros y Tanathos en su cromatismo, mientras que la arquitectura del sitio del suceso es representado en pequeños retablos de fragmentos de estos lugares incrustados en las obras, como si se tratase de trozos de paisaje urbano que otorgan volumen al encuadre fotográfico de estos sitios. Así, el retablo, dada su naturaleza original que oscila generalmente entre lo patrimonial o el souvenir ingenuo, alcanza un nivel irónico, sarcástico y extraño que se acentúa al ser pintado en escala de grises, un juego cromático y óptico que se enlaza con la fotografía.

Acompañan a estas “páginas” una instalación compuesta por diversos objetos, una maqueta, una proyección de sombras y diversas fotografías de sospechosos y víctimas que de manera melodramática arman un relato tan estereotipado como lo fue para los lectores de VEA.

Un detalle clave de la revista VEA para desplegar gráficamente la reconstitución de escena de los sucesos policiales consistía en fotografiar la fachada del lugar y presentarla en sus páginas, un recurso que hoy en día es muy difícil advertir en la prensa escrita, tal vez por razones legales y/o pudor periodístico. Esta insistencia en precisar el sitio del suceso le otorgó a esta revista un concepto que involucra una rigurosa indicialidad y el mapeo de la ciudad.

Revista VEA trabajó interesantes manipulaciones de la imagen, gráfica, color y tipografía con una economía de medios que empatizan con las manipulaciones propias del arte contemporáneo pero sin ser premeditadas, generando un espacio de especulación que para Portus como artista autodidacta es altamente sugerente, sumando además que este tipo de revistas fue en su niñez parte importante de su primer acercamiento a la imagen mucho más que la televisión y antes de siquiera pensar en ser artista.

Portus combina en estas obras materiales artísticos, cotidianos, reciclados e industriales, utilizando un formato y una composición similares a la diagramación periodística.  El uso de la luz y sombra es persistente en su obra, remitiéndose así a referentes filosóficos como La Caverna de Platón, cinematográficos -como Metrópolis- y pictóricos, como Edward Hopper.