Skip to content

COPIAS DEL ABANDONO. LA ANAQUITECTURA DE LA MIGRACIÓN MEXICANA

Copias del abandono es un proyecto de largo aliento de la artista, investigadora y coordinadora de prácticas sociales Sandra Calvo que analiza la arquitectura de la migración entre México y Estados Unidos. Con ello, expone cómo las viviendas de los migrantes reflejan su experiencia de dejar su lugar de origen, sus sueños de una vida mejor y su conexión constante con sus raíces.


Sandra Calvo. Casa Modelo, Casa Habitada y Casa Soñada. Cortesía de la artista

La migración hacia el norte es una de las consecuencias de la desigualdad y de la violencia sistémica que se vive en México. Los mexicanos son todavía el grupo más grande de migrantes radicados en Estados Unidos. Su desplazamiento continuo, a lo largo de varias generaciones, ha conformado lazos geográficos entre las localidades “expulsoras” y las “receptoras”.

Copias del abandono se enfoca en una comunidad en particular que corresponde al 80% de los latinos que residen en el estado de Wyoming, los cuales son originarios de Tlaxcala, y en donde, curiosamente, nace la palabra en náhuatl tecpancalli: las casas reales. No obstante, ejemplos como este se replican en todo el territorio mexicano.

El propósito de la investigación de Sandra Calvo es mapear, identificar y analizar las directrices y singularidades que dan pie a una reflexión en torno a las problemáticas de la vivienda en sociedades de flujo migrante por medio de interrogantes específicas: ¿Qué tipo de casa habitan los migrantes entre un territorio y otro? ¿Qué valor estético tienen? ¿Qué características vitales tienen los espacios que permanecen en un estado de ambigüedad, en donde no se sabe si la casa se está construyendo o se está abandonando y cuáles son los motivos? ¿Cuáles son las capas territoriales, sociales, culturales y políticas en este flujo arquitectónico?

El estudio muestra las diferencias y similitudes en el estilo de vida de los migrantes, sus aspiraciones individuales, su realidad social y los modelos de vivienda en ambos países. Existen tres momentos clave en las residencias, ya sean de paso o permanentes, de los migrantes a lo largo de su recorrido entre Tlaxcala y Wyoming, “estados hermanados”.

Sandra Calvo. Detalle de Casa habitada. Cortesía de la artista

El primero es la Casa Habitada, que se refiere a los remolques, a los cuartos de motel o a los sótanos donde viven los migrantes. Son lugares donde las amenidades son precarias y están destinadas a cubrir las necesidades más básicas. Los migrantes, por lo general, comparten el espacio entre dos o tres núcleos familiares con un parentesco o con lazos de trabajo.

En muchas ocasiones, los integrantes se ven obligados a rotar de cama y viven bajo la constante amenaza de desalojo. Estos lugares, que al inicio son temporales, se convierten en sus casas a largo plazo; son viviendas inestables y aisladas y el alquiler representa la mayor parte de sus ingresos.

En segundo lugar, están las Casas Modelo. Estas son las residencias del pueblo de Jackson Hole (Wyoming), mansiones millonarias, o Mc Mansions, construidas por los migrantes y que permanecen vacías diez meses al año. Las casas desocupadas requieren de un constante mantenimiento, proporcionado también por los migrantes a lo largo del año: cambio de sábanas cada tercer día y calefacción para proteger las tuberías. Estas casas sirven de inspiración arquitectónica y de modelo para la construcción de las casas soñadas.

Sandra Calvo. Casa soñada. Cortesía de la artista
Sandra Calvo. Detalle de Casa soñada. Cortesía de la artista
Sandra Calvo. Detalle de Casa soñada. Cortesía de la artista

La construcción de la Casa Soñada puede durar décadas y la mayoría queda en obra negra por diferentes razones: sus dueños no pueden volver a México, los recursos son insuficientes o los familiares en Tlaxcala reciben amenazas por parte de grupos delictivos que detectan un ingreso. Estas casas recrean, bajo un espíritu anarquitectónico, los prototipos de las mansiones de Wyoming: escaleras curvas, techos a dos aguas, arcos, columnas, estacionamientos y jardines.

Sin embargo, no cuentan con servicios públicos cercanos y el uso de suelo donde están ubicadas es de muy poco valor inmobiliario.  El proceso de producción está regulado por un constante flujo de información y remesas. Los migrantes envían a sus familiares —además de dinero— fotografías, recortes de revistas y bocetos dibujados por ellos mismos que sirven de material de referencia para el diseño.

El proyecto nos remite a la realidad de un crecimiento rural-urbano que no está regulado ni tampoco se somete a los parámetros de la planificación municipal: es autogestivo y libre. Los terrenos donde se construyen estos palacios por lo general se encuentran junto a las casas de sus familiares, en un gesto por recuperar al paisaje del olvido, de sentido de pertenencia y de presencia en un lugar donde ya no están, pero vuelven constantemente. Es el reflejo de la pulsión vital y del deseo de no desaparecer.

En este sentido, el móvil del trabajo, el ahorro y la inversión es hacer realidad el ideal de una casa que quizá nunca lleguen a habitar, pero cuya construcción les motiva y complace, y además responde a la necesidad de pensar e imaginar una vida distinta a la que tienen. Los palacios están vacíos, pero no vacíos de significado ni de sentido. Son esculturas, templos.

Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala, CCE México, 2023. Cortesía de la artista
Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala, CCE México, 2023. Cortesía de la artista
Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala, CCE México, 2023. Cortesía de la artista
Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala, CCE México, 2023. Cortesía de la artista

Casas del abandono cuenta con un acervo documental en formato audiovisual, que se complementa con investigación de campo: testimonios orales, maquetas y planos cartográficos de rutas migrantes.

Todo esto conforma un archivo expandido donde los cruces (in) disciplinares con  la geografía, la antropología, la arquitectura, la historiografía y el arte se ponen en juego para complejizar las reflexiones críticas, cuestionar las condiciones materiales y vitales de este hábitat triple de la migración, marcado por sus tránsitos, su temporalidad fragmentada, por nociones de arraigo y abandono y mutaciones del paisaje, que finalmente constituyen una declaración acerca del derecho a la vivienda y la autoconstrucción en sociedades de flujo migrante, sociedades nunca estáticas.

Copias del abandono permite explorar el reflejo del abandono del lugar de origen, de las rutas y flujos migratorios, del territorio temporal, de las familias que permanecen a la espera y de las mutaciones del paisaje.

Somos testigos de estos espejismos en donde el hecho de que no haya arquitectos no significa que la arquitectura no exista. Los palacios son el resultado del trabajo y del esfuerzo por construir una casa propia, de la añoranza y del arraigo que los migrantes mantienen con sus familias y sus comunidades después de vivir años en el extranjero.

El intercambio material entre estos espacios es la prueba de una necesidad de imaginar una vida mejor y distinta de la real, donde la primera sirve como motivación para encarar a la segunda. El sueño de una vida mejor en otro lado, lejos, en otra casa. Dejar el lugar de origen y seguir la ruta migratoria de los que se van. Luego, la espera de los que se quedan y, atrás, un paisaje siempre cambiante y despojado. Es la nostalgia y el deseo de no perderse en el camino, es la huella y el testimonio tangible de la arquitectura migrante.

Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala, CCE México, 2023. Cortesía de la artista
Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala, CCE México, 2023. Cortesía de la artista

Sandra Calvo es artista, investigadora y coordinadora de prácticas sociales. En los últimos años ha desarrollado diferentes proyectos en localidades de México, Colombia y Cuba. Estos se caracterizan por un marcado componente contextual, participativo y procesual, al ser pensados para comunidades y espacios específicos.

Sus proyectos exploran las estrategias de resistencia y supervivencia como la auto-construcción y la auto-organización, donde se cruzan los saberes populares y ancestrales. Generalmente se desarrollan en largos lapsos de tiempo y están determinados por soluciones híbridas en la conjunción de saberes procedentes de la antropología, la arqueología, la sociología y/o la cinematografía.

Sus investigaciones derivan en documentales, cine-arquitectura, instalaciones, fotografías, archivos y esculturas, dispositivos que funcionan como soporte y medio para el diálogo –cognitivo y disruptivo– donde se ensayan nuevos modos de enunciación y posicionamiento.


Copias del abandono (2016 – en curso), una colaboración entre Sandra Calvo y comunidades migrantes de Tlaxcala se presenta en el Centro Cultural de España en México hasta el 8 de octubre de 2023.

También te puede interesar

Jorge Satorre, Sin título, 2019, haya tallada y siete elementos de acero forjado. Foto cortesía de CarrerasMugica, Bilbao

El Nudo

CarrerasMugica, en Bilbao, presenta hasta el 30 de julio "El nudo", primera exposición curada por Manuela Moscoso (Ecuador) para la galería española. En ella participan Lorena Ancona, Mariana Castillo Deball, Rodrigo Hernández, Ana Navas,...

CISCO JIMÉNEZ. ANATÓMICA

Desde su temprano entrenamiento como caricaturista editorial, el rico y disyuntivo lenguaje visual que ha desarrollado Cisco Jiménez se basa en diversas influencias, las cuales incluyen el surrealismo, la pintura y escultura prehispánica y...