PRIMERA MONOGRAFÍA DEFINITIVA DE FOTOGRAFÍAS EN COLOR DE VIVIAN MAIER

Aunque han pasado varios años desde el descubrimiento del notable trabajo de Vivian Maier (Estados Unidos, 1926 – 2009), la mayoría de los detalles de su vida siguen siendo un misterio. La historia la ubica como una enigmática fotógrafa y niñera que con la potencia atemporal de su obra se ha convertido en toda una sensación, uniéndose a las filas canónicas de los mejores fotógrafos de calle de mediados de siglo XX, como Garry Winogrand, Lee Friedlander o Diane Arbus.

Poco después de su muerte, y hasta la fecha, se va reconstruyendo una parte de su vida solo a partir del puñado de hechos que han emergido alrededor de esta y, por supuesto, de las fotografías ya vistas o más conocidas. Maier realizó más de 150.000 imágenes, que por decisión propia no las mostró mientras estaba en vida.

La exposición Vivian Maier: The Color Work, que se presenta hasta el 28 de junio en la Fototeca Latinoamericana (FOLA), en Buenos Aires, es una colección curada de su trabajo en color, la mayoría perteneciente a diapositivas Kodak Ektachrome. Gran parte de sus fotografías en color va desde la década de 1970 hasta su muerte. En este trabajo, fue más abstracta que con las imágenes en blanco y negro que normalmente capturaba y que mostraban a los niños que cuidaba o las personas en la calle. Su trabajo a color se centró más en objetos, como periódicos o imágenes de acontecimientos cotidianos en las calles, primeros planos y detalles puntuales que su mirada captaba, pero sin dejar de lado el oportunismo de una toma, ya sea por la situación o los personajes que veía.

Colin Westerbeck, ex curador de fotografía del Instituto de Arte de Chicago, y la Galería Howard Greenberg, que representa a Vivian Maier, han seleccionado aproximadamente 150 imágenes de sus archivos y las han reproducido en alta resolución, especialmente para su libro Color Work. Un prólogo de Joel Meyerowitz, un maestro de la fotografía en color de renombre mundial, y un texto de Westerbeck arrojan luz sobre la naturaleza de estas imágenes de Maier, comparándolas con sus imágenes en blanco y negro, así como con el trabajo de sus compañeros. Ambos ofrecen una comprensión más profunda de esta intrigante fotógrafa y enfatizan cuán entusiasta era para grabar y presentar su interpretación del mundo a su alrededor a través de sus imágenes.

En The Color Work también vemos la transición de su famosa Rolleiflex a una cámara de 35 mm, algo que choca con la línea habitual de trabajo de Maier, pues su tendencia era pasar lo más desapercibida posible, cosa que era mucho más fácil con la primera cámara. También sorprende su cambio al color, cuando su preferencia por el blanco y negro era obvia. De todo esto se deduce que es probable que, en esta época, la fotógrafa estuviera en una fase de experimentación y descubrimiento de nuevas técnicas y enfoques.

Estas imágenes provienen de la colección de John Maloof, quien descubrió las imágenes de Maier, posee la mayoría de ellas (unos 100.000 negativos que compró en una subasta) y trabaja en conjunto con el patrimonio de Maier, la Galería Howard Greenberg, que muestra las imágenes de la colección de Maloof, participa en la creación y comercialización de publicaciones y coordina constantemente exposiciones en todo el mundo que mantienen vivo el legado de esta gran artista.

VIVIAN MAIER: THE COLOR WORK

FOLA (Fototeca Latinoamericana), Godoy Cruz 2626, Piso 1, Distrito Arcos, Palermo, Buenos Aires.

Del 6 de marzo al 28 de junio de 2020.