GALERÍA TAJAMAR CIERRA TRAS OCHO AÑOS Y ANUNCIA PROGRAMA DE RESIDENCIAS
Tras ocho años de funcionamiento, el pasado sábado 7 de julio fue el cierre simbólico de Galería Tajamar, espacio expositivo independiente de arte contemporáneo y sin fines de lucro –fundado por los artistas Florencia Infante y Nicolás Azócar–, ubicado en uno de los locales comerciales hexagonales de la plaza del emblemático complejo habitacional Torres de Tajamar, en la comuna de Providencia, en Santiago de Chile.
“Es una mezcla de cosas lo que termina con el cierre de la galería”, apunta Azócar, en conversación con Artishock. “Por una parte hay un tema circunstancial: la dueña [del local] quería reajustar el valor del arriendo, que lo hizo un poco inesperado. También hay un desgaste natural del proyecto, el que nosotros vimos como una oportunidad para poder enfocarnos en el desarrollo de nuevos programas para la Fundación Tajamar que ya van a estar activos en el segundo semestre”, agrega.
Luego de despedir la última muestra de la galería, Calymene Siveter (1996), de la artista neerlandesa Maaike Anne Stevens, fue anunciada la nueva etapa de Fundación Tajamar, que da paso al nuevo Programa de Residencias Tajamar, un sistema de residencias orientado a continuar profundizando en la creación artística, la investigación y el diálogo, llevando el arte a la comunidad, promoviendo proyectos de gestión independiente y buscando la participación de nuevas audiencias.
Si bien se deja el tradicional hexágono que alojaba a la galería, el Programa de Residencias Tajamar permanecerá dentro de las Torres de Tajamar, esta vez en un departamento del complejo en donde se entregará un programa multidisciplinario para artistas y agentes culturales. El programa ofrece un espacio para propuestas artísticas, diálogos críticos y perspectivas diversas de aprendizaje, a través de lo que esperan generar conexiones entre arte, espacio público y comunidad, implementando activaciones artísticas en los espacios que ofrece la arquitectura del recinto.
“El propósito de Fundación Tajamar es desarrollar y gestionar proyectos relacionados al arte contemporáneo que generen un aporte cultural, apoyando transversalmente la difusión de artistas. También buscamos preservar y promover proyectos de gestión independiente, apuntando a la participación de nuevas audiencias. En este sentido nace el programa de residencias, que está ubicado en un departamento de las Torres de Tajamar, rodeado de una comunidad que de a poco se ha ido relacionando con un proyecto de arte contemporáneo y que hoy está muy abierta a seguir trabajando con nosotros para poder ocupar otros espacios de las Torres de Tajamar que, a su vez, están abiertos a toda la ciudad”, comenta Nicolás Azócar.
El Programa de Residencias Tajamar comienza en el segundo semestre de 2018 con dos residencias artísticas. Para la primera de estas fue invitada la artista visual bosnia radicada en Berlín Jelena Fuzinato, cuya residencia es organizada en alianza con el Goethe Institut de Santiago. Durante su estadía, durante los meses de julio y agosto, Fuzinato trabajará en una serie de dibujos basados en los testimonios recabados en la comunidad de las torres.
Luego, entre septiembre y octubre, Residencias Tajamar, en alianza con la Embajada de Dinamarca en Chile, acogerá a la curadora danesa radicada en Londres Mette Kjærgaard Præst, quien buscará expandir y conectar dos áreas de su investigación, centrándose en la conexión chilena entre lo político, el paisaje y la conciencia socioemocional. El programa proporcionará tiempo, espacio y acceso a los archivos para el desarrollo de una investigación y una propuesta curatorial sobre la escena artística chilena actual.
Acerca del futuro del proyecto, Azócar cuenta: “Nosotros seguiremos trabajando como lo hemos hecho hasta ahora, de manera transversal con artistas locales y extranjeros. Además del programa de residencias internacionales, estamos preparando otros proyectos que aún no se concretan, por eso no los hemos anunciado. Ahora el desafío es otro: movilizar artistas es completamente distinto a lo que veníamos haciendo hasta ahora. Es muy necesario contar con el apoyo de alguna institución para esto; durante estos años hemos ido gestionando una relación con algunas que hoy nos permiten traer artistas y curadores extranjeros, pero la situación local es súper inestable, a veces se puede y otras no… Pero si no tenemos el apoyo, de todas formas buscaremos la manera de ser fieles a nuestro propósito”.
Fundada en 2011, Galería Tajamar emergió como un espacio que desafió el modelo comercial tradicional de las galerías de arte en la escena chilena, debutando con la muestra Diamante Hueco del artista Rodrigo Canala. En sus siete años de existencia, Tajamar albergó a 68 artistas, tanto consagrados como jóvenes, incluyendo a Juan Castillo, Rosa Velasco, Benjamín Ossa, María Gabler, Jessica Briceño (ganadora de la primera Beca Tajamar en 2016), Sebastián Mahaluf, Rodrigo Vergara, Rodrigo Arteaga y Diego Santa María, quien obtuvo una mención honrosa en la última edición de Galería Weekend Santiago con la penúltima muestra de la galería, Agencia de Cooperación Vecinal. En 2016, Fundación Tajamar publicó el libro Galería Tajamar | 5 años, con el que conmemoró su quinto aniversario, el cual reúne la trayectoria del espacio hasta ese momento.
Imagen destacada: Vista de la muestra Diamante Hueco (2011) de Rodrigo Canala, exposición inaugural de Galería Tajamar en Providencia, Santiago de Chile. Foto: Sebastián Mejía, cortesía Galería Tajamar.
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